Las infidelidades han llegado a la vida
de las mujeres, debido a que no pueden evitar sentir deseos tanto
como los hombres y que estamos en una era totalmente llena de avances
por lo que los estigmas sociales sobre su sexualidad han quedado en
el pasado, por consiguiente aquellas féminas que sienten la
necesidad de tener pasiones al lado de chicas guapos, lo harán sin
ningún inconveniente haciendo víctima de traición a su pareja.
Y
es que los hombres a lo largo de la historia se han manejado de esa
manera, no cabe la duda de que han sido esclavos de sus pensamientos
eróticos y que hoy más que nunca, se sienten especialmente atraídos
por la belleza femenina, ya que no tienen complejos para lucir lo que
les gusta y cuando se trata de sensualidad, han hecho todo lo que
está en sus manos para ser el centro de atención y de las miradas,
por lo tanto las tentaciones externas abundan en los chicos, pero
ciertamente son las chicas las que toman ese control, sabiendo que al
ser débiles pueden lograr lo que quieren cuando lo quieren y más si
ofrecen temas de pasiones.
Hay chicas que son infieles a través
de su mirada, llegan a tener deseos por hombres que ven a su
alrededor y sucede mucho, que hay ocasiones en que aun teniendo un
hombre cumplidor, se dan a la tarea de conseguir un chico fornidos
que las llene de satisfacción, contando con la ventaja de que ellas
no deben ser tan selectivas en la búsqueda de ese hombre, ya que los
chicos siempre están dispuestas a una aventura de cama sin
compromisos, algo que no todas las chicas están dispuestas y que por
eso los hombres que son infieles tienen más problemas de lograr
tener una buena intimidad sin preocupación.
Y es en los bares donde esas mujeres
atrevidas que no ocultan su desee infiel hacen uso de sus
seducciones, se muestran con mucha picardía y coquetería, con ese
atrevimiento que tanto las caracteriza y que enloquece a los del
lugar, por lo tanto así se inician muchas aventuras de cama, pero
siendo exigentes queriendo a un chico que las sepa consentir y mimar,
un hombre que sea capaz de tocarlas donde ellas tanto lo quieren,
pues sabemos que la sexualidad femenina es mucho más compleja y que
requiere de buenos juegos de caricias para lograr su éxtasis.
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